¡Feliz miércoles para todos! Hoy compartimos un poco del evento que organizó el Comité Empresarial de Mujeres de la Cámara de Comercio Argentino Americana en Florida, y que tuvo lugar el pasado martes 23 de Agosto en Bunbury Miami.
Quiero empezar destacando la organización del evento. Las coordinadoras del Comité, Paula Rubin y Elisa Weiner, generaron una convocatoria espectacular, Bunbury estaba lleno tanto de miembros de la Cámara de Comercio Argentino Americana, como de invitados, y miembros representantes de otras Cámaras y Capítulos e Instituciones como por ejemplo: El Consulado General Argentino en Miami, el Chapter AMBA (AACC), la Brazilian American Chamber of Commerce, FEBICHAM, representada por Directores de la: Uruguayan American Chamber y Venezuelan American Chamber, también se contó con el apoyo de empresas como Infonegocios Miami, Tax Leaf Weston y Natalia Ocampo Coach Empresarial, se vivió una gran oportunidad para conectar con personas con trayectoria, experiencia y fuerte presencia en USA.
Quiero destacar la calidad humana de los participantes. Más allá del profesionalismo, en la Cámara de Comercio Argentino Americana, en el Comité Empresarial de Mujeres y en FEBICHAM, hay una comunidad de inmigrantes que pasamos por muchos desafíos similares, y eso nos une en la generosidad de querer ayudar a los que están llegando, a los que están desarrollando su emprendimiento o expandiendo su negocio. Por esto, una vez más, los invito a todos a sumarse, a conectar, y a aprovechar las oportunidades que se presentan en círculos con tanta sinergia.
Las formas de contacto y de inscripción son mediante la web www.argentineamerican.org o al email info@argentineamerican.org
Además, voy a repasar los puntos más importantes del tema expuesto: “Impacto social, familiar y económico de las madres laboralmente activas”
En el desarrollo de hijas e hijos
- El 23% de las hijas de madres trabajadoras ganan más que las hijas de amas de casa.
- Los hijos de madres trabajadoras, dedican 7,5 horas más cada semana al cuidado de los niños y 25 minutos más a las tareas del hogar. Los hijos varones de madres trabajadoras, tienen actitudes de género significativamente más igualitarias, incluso más que las hijas de madres que no trabajan.
En la salud física y mental de las mujeres
- Si hablamos de responsabilidades familiares, la madre trabajadora promedio trabaja
98 horas a la semana. - El 66% de las madres trabajadoras no duerme más de 6 horas por la noche.
- El 37% de las madres experimentó efectos negativos en su salud física y mental durante la pandemia. La falta de sueño y el cansancio constante fueron consecuencias clave del estrés múltiple experimentado por las madres trabajadoras durante la pandemia, así como de problemas de salud mental. (Si se sufre la falta de sueño, hay un riesgo mucho más alto de padecer enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y depresión).
Económico en el mercado global
- Las madres trabajadoras son un segmento importante de la fuerza laboral, y su salida de la fuerza laboral acentúa un mercado laboral ya impactado. Según el Centro para el Progreso Estadounidense, si las madres no regresan a la fuerza laboral, le costará a
nuestro país $64.5 mil millones.
- La generación millennial es la primera en la historia en la que las mujeres están más
más educadas que los hombres. Las empresas y nuestra economía deben descubrir cómo mantener a las mujeres educadas trabajando en la fuerza laboral una vez que ingresan a la maternidad, así como invertir en la reincorporación y la reintegración de las madres a medida que regresan al trabajo.
¿Qué acciones simples podemos tomar para generar un impacto como líderes?
Flexibilizar las jornadas: entendiendo la realidad familiar de cada persona, aunque lo clave será la estabilización de los establecimientos educacionales, entregando mayor libertad a las mujeres en sus casas para que puedan volver a ser parte de la fuerza laboral.
Pago completo durante la licencia de maternidad: Solo el 6 por ciento de la población total de empleadores con 50 o más empleados encuestados ofreció pago completo durante la licencia de maternidad, mientras que el 39 por ciento ofreció pago parcial y el 42 por ciento no ofreció ningún tipo de compensación.
Flexibilidad en el lugar de trabajo: es la forma más efectiva de mantener a las madres en sus trabajos. Docenas de madres trabajadoras elogiaron sus lugares de trabajo por la flexibilidad, que les permitió sobrevivir durante la pandemia. De las madres que dijeron que tenían un empleador flexible, el 52 % dijo que era más probable que permanecieran con ese empleador a largo plazo. Cuando se les preguntó qué podrían hacer los empleadores para apoyarlas mejor, el 38% de las madres mencionaron días de descanso flexibles y el 36% de las madres mencionaron horarios de trabajo flexibles.
Aprovechar tu red de sostén: un síntoma del agotamiento es el aislamiento. Si bien retirarse puede ayudar a recargar energías, hablar con alguien acerca de cómo te sientes puede ayudar a disminuir el peso de emociones como la culpa, la fatiga y sentirse abrumado. Recuerda que siempre podemos pedir ayuda.
Manejar las expectativas y tratar de ser realista: al establecer expectativas, es importante tener en cuenta tu nivel de energía, compromisos previos y estado emocional. Anotar sus objetivos y volver a evaluarlos cada semana para ver si están funcionando o si necesitan ser modificados, es una buena forma de poner esto en práctica.
Crear nuevas rutinas: es fundamental crear nuevos rituales en tu vida. Tomate un tiempo en la mañana para comer o configurar un cronómetro para pararte y caminar después de una o dos horas de trabajo. También, puede ser útil programar un «momento de tranquilidad»: un descanso a tus ojos de una pantalla y que te permita relajarte. Si trabajas desde casa, no debes olvidar ejercitar tu cuerpo, caminar, salir afuera a tomar aire fresco o incluso algo de sol. Los nuevos rituales que crees te ayudarán a equilibrar tu día en el resto de tu lista de tareas pendientes y tu cuidado personal.
Dejar de intentar realizar múltiples tareas todo el tiempo: cuando estés con tus hijos, permítete estar presente con ellos en lugar de tratar de responder un correo electrónico. Si estás en una reunión, concéntrate en la reunión.
Para terminar, quiero invitarte a reflexionar sobre el tipo de líder que sos, y el tipo de líder que querés ser.
De la forma que yo lo veo, como líder tengo la responsabilidad ética de velar no solo por la salud de mi negocio, sino también por la salud de mi equipo. Tener la oportunidad de generar puestos laborales es un privilegio. Ser parte del mercado laboral en un momento de la historia donde hay tanto capital humano tan profesionalizado disponible, es un lujo. Construir las condiciones para el desarrollo de ese capital humano, es un desafío.
Generar condiciones más adecuadas para que un grupo tan grande y tan importante de nuestra sociedad pueda insertarse laboralmente es lo que va a marcar la diferencia entre las compañías con equipos más saludables, eficientes y motivados. Versus las compañías que se queden en el pasado con sistemas de motivación obsoletos, que en el corto plazo van a generar menores costos, pero en el largo plazo mayor rotación de personal, falta de experiencia, constante entrenamiento, y costos más altos por falta de eficiencia.
El mundo requiere que evolucionemos y nos adaptemos, buscar el cambio es parte de lo que nos define como líderes que somos.
La frase “El tiempo es dinero” es vieja, pero hoy más que nunca tomó valor. La clave de la motivación está en dos palabras: “tiempo” y “flexibilidad”.
Obviamente, dejo de lado a todas las compañías que requieran presencialidad y horarios estrictos. En ese caso la pregunta sería “¿Qué SI se puede hacer?”.
Redacción: Gise Di Fabio para el Comité Empresarial de Mujeres AACC / FEBICHAM
