¿YA termina Marzo o RECIÉN termina Marzo?

Como lo veamos depende de cada uno, pero lo cierto es que el primer trimestre del año está terminando y puede ser una oportunidad para reflexionar.

• ¿Cómo te encontrás?
• ¿Dónde te encontrás respecto de tu plan y tus objetivos?

Encuentro a muchas personas no queriendo analizar el paso del tiempo, algunas no quieren hacerlo porque no lo consideran necesario, otras no lo hacen por falta de conciencia al respecto, y por último, están las personas que lo analizan sobre el final de un ciclo o año calendario. Normalmente, en estos casos tienen en común la falta de definición de metas claras, muchas veces las metas son mucho menos exigentes del potencial que tenemos, y además, la falta de análisis es por ansiedad y temor a la evaluación.

Personalmente creo que nunca es demasiado temprano ni demasiado tarde para revisar dónde y cómo estamos, y así generar cambios, ya sea en la vida personal o profesional. Más allá de que cuanto antes comencemos, antes vamos a alcanzar la meta. Esto nos va a permitir llegar más cómodos, lidiar de una mejor forma con potenciales imprevistos, y hasta superar los objetivos que nos propusimos.

Los cambios llegan a nuestra vida cuando estamos preparados, lo importante es encontrarnos abiertos y en busca de ellos para encararlos con el mejor plan posible. 

Hablo de cambios porque siempre que tratamos de generar una mejora estamos rompiendo un patrón, trabajando un pensamiento limitante o finalizando un ciclo, entre otras. En estos puntos es cuando ya aprendimos lo suficiente de cierta etapa y estamos listos para pasar a la próxima.

Terminando este primer trimestre del año escucho estas dos perspectivas, YA y RECIEN. Lo importante es que independientemente de la velocidad en que pase el tiempo para cada uno, nos encontremos conectados con el presente, teniendo intención e impacto con nuestras acciones, haciendo el mejor uso posible de este recurso tan valioso y finito, comprendiendo que dichas acciones dependen 100% de nosotros y consecuentemente los resultados también.

Leyendo “Atomic Habits” aprendí que los hábitos son el interés compuesto de la evolución personal, es decir, se comportan como el interés compuesto en el dinero. Por lo tanto, si todos los días realizo una mejora del 1% en algún aspecto de mi vida, al final del año voy a haber mejorado ese aspecto 37 veces. Caso opuesto, si todos los días empeoro un 1%, al final del año me voy a encontrar con un acumulado que tiende a cero. Como podemos ver, lo que empieza como un pequeño paso, ya sea de mejora o involución, termina afectando mucho al resultado.

Algunos autores sostienen que la acción masiva es lo que nos va a permitir sobresalir y llegar a las metas. Cuando lo analizo, pienso que podemos basar esta acción masiva en pequeñas acciones que afecten diferentes aspectos de nuestra vida y que tengan mucho impacto. De esta forma, vamos a lograr construir hábitos que sean sustentables a lo largo del tiempo. En cambio, si al tomar acción masiva generamos un plan basado en la evolución de un solo aspecto de nuestra persona, vamos a tener un resultado positivo, pero no vamos a tener un hábito saludable, ni sostenible, y además vamos a correr el riesgo de descuidar otros aspectos de nuestra cotidianidad. 

Por último, me arriesgo a decir que, si tenemos un buen plan y generamos buenos hábitos, vamos a superar nuestros objetivos.

Por lo tanto, quiero invitarte a reflexionar sobre tus metas, los planes que hiciste para alcanzarlas, y cómo los estás ejecutando.

Con estas ideas presentes, te pregunto:

• ¿Cómo querés encontrarte al final del año?
• ¿Cuál es ese 1% que vas a mejorar cada día y en qué aspecto?
• ¿Cómo vas a implementar ese cambio?
• ¿Cuánto te animas a incrementar tus objetivos? Considerando que podés mejorar 37 veces cada área

Si te encontrás confundid@, no sabes por dónde empezar, o si querés repasar el plan y los objetivos, contáctame a gi@itscoachingtime.com. Yo puedo ayudarte a lo largo del proceso, y así ¡vas a llegar al final del año como te lo propongas!

Y acordate, no podemos cambiar nuestra esencia, pero podemos convertirnos en personas virtuosas y construir la vida que queremos tener.

Redacción: Gise Di Fabio para el Comité Empresarial de Mujeres AACC/FEBICHAM

comitedemujeres@argentineamerican.org