El streaming —emisión televisiva en directo por Internet— acapara el 70% del tráfico de la Red. En el mundo hay 850 millones de hogares abonados a las plataformas existentes, lo que multiplica su alcance por tres o cuatro, dado que algunos miembros de la familia comparten la suscripción con terceros; grosso modo, un tercio de la población del planeta está enganchada a una pantalla. A un ritmo de estrenos de casi 550 series el último año, el colosal negocio ha revolucionado el mundo del entretenimiento y se ha consagrado en tiempo récord, poco más de una década, sin escatimar recursos: un capítulo de la exquisita serie The Crown cuesta 13 millones de dólares; 10, uno de Juego de tronos.
El confinamiento derivado de la pandemia ha aquilatado su pujanza, pero la amplitud de la oferta amenaza con saturar la elección, y algunos se plantean no ya si estallará cual burbuja, sino cuánto tardará en hacerlo, o como mínimo en sedimentarse, en un mercado emergente como pocos, pero también tensionado en esfuerzos, inversión y competencia.
Así lo explicita un informe que J. P. Morgan distribuyó a sus clientes el pasado 7 de enero: “Con el lanzamiento de Discovery+ el 4 de enero y el cambio de marca de CBS All Access en Paramount+ a comienzos de año, las líneas del frente en la guerra del streaming han quedado definidas. Si 2020 fue el año de los grandes lanzamientos OTT [over the top, servicios de streaming por Internet], 2021 podría ser aquel en el que empecemos a conocer a los ganadores y perdedores de esta carrera”.
El periodo comprendido “entre los próximos 6 y 18 meses” será el cedazo que despeje el horizonte de las plataformas, según este banco de inversión: “Pocos esperan que haya docenas de ganadores, pero sí creemos que puede haber cinco grandes líderes”. El informe establece cuatro categorías en orden decreciente: “Ganador casi seguro (Netflix, Amazon Prime Video, Disney); con potencial para ser ganador (Paramount+, HBO Max); a cara o cruz (servicios AVOD, Discovery+, Apple TV+ y redes premium), y perdedores (todos los demás)”. AVOD (acrónimo de Advertising Video On Demand) son los vídeos bajo demanda que se financian a través de la publicidad; el caso paradigmático es YouTube.
Fuente: https://elpais.com/economia/2021-02-20/adictos-a-las-series-asi-es-el-negocio-millonario-del-streaming.html