La realidad aumentada cobrará una enorme relevancia en el mundo de los negocios a medio plazo. Al menos, esta es la previsión de diversos analistas y profesionales de este ámbito. Para empezar, esta tecnología puede ampliar el alcance de las empresas, puesto que permite eludir los límites de carácter geográfico. Gracias a este método, las compañías pueden desarrollar su actividad al margen de las condiciones externas.
Por ejemplo, la realidad aumentada se está empleando ya en auditorías de seguridad o en la atención médica de enfermos o personas accidentadas. Los expertos remotos guían a los técnicos locales para que lleven a cabo la inspección sobre el terreno. Pero no es necesario que este personal, más cualificado y, por tanto, caro, tenga que desplazarse. De hecho, cabe la posibilidad que las tareas físicas las ejecuten drones o robots.
Quienes dirigen estas operaciones entran en la realidad sobre la que trabajan las máquinas mediante la visualización del espacio a través de dispositivos que emplean información gráfica añadida. De esta manera, están virtualmente en un lugar en que físicamente no están, y tal vez nunca estarán. Cuando la interacción se da con seres humanos, estos tienen el privilegio de participar en sesiones de capacitación a través de experiencias inmersivas.
Para obtener el máximo provecho de este sistema, especialistas como Thomas Cottereau, cofundador de la firma SightCall, recomiendan que se utilice con frecuencia, no solo cuando se haya producido alguna contingencia. Si se normaliza esta práctica, agrega este CEO, que es igualmente miembro del consejo de la prestigiosa revista Forbes, los trabajadores serán más ágiles y estarán mejor preparados para afrontar los retos que traiga el futuro.
Esta transformación requiere un liderazgo claro, para concretar hasta dónde llega lo físico y en qué punto empieza lo virtual. Los analistas subrayan que la experiencia de los usuarios mejora con esta tecnología, puesto que los clientes potenciales no tienen qué imaginarse los productos o servicios que les puede prestar una organización… porque los ven y casi, casi los pueden tocar y sentir.
Los servicios públicos son los esenciales para el funcionamiento de una infraestructura, un negocio o un hogar. En general, se asocia este concepto a la electricidad, el gas, el agua, el teléfono o la recogida de basura. Sin embargo, en la época de la cuarta revolución industrial, y en plena pandemia del coronavirus, Cottereau considera que la conexión de banda ancha también debería integrarse en este grupo. “¿Y quién sabe si acabará sucediendo lo mismo con la realidad aumentada?”, se pregunta.
Fuente: https://www.lavanguardia.com/tecnologia/20211227/7951868/realidad-aumentada-negocios.html