En algún punto de 2021, los países emergentes que forman el grupo de los BRICS -Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- dejaron de ser un bloque aspiracional y pasaron a convertirse en un bloque geopolítico de pleno derecho en la comunidad internacional.
Fue ese año cuando sorprendieron con su progreso económico y el PIB de los BRICS superó al de sus homólogos del G7 en términos de paridad de poder adquisitivo como porcentaje del PIB mundial.
El G7 está formado por Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, Francia, Alemania, Italia y Japón. Es una organización que incluye a las siete economías «avanzadas» más grandes del mundo, las que dominan el comercio mundial y el sistema financiero internacional.
Y es que pese a que los BRICS incluyen a grandes potencias mundiales, como China y Rusia, y países de gran peso en sus continentes, como Sudáfrica y Brasil, sus miembros se quejan de que las naciones occidentales controlan organismos importantes como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, que prestan dinero a los países.
De ahí que no solo hayan pedido una «mayor voz y representación» para las economías emergentes, sino que a partir del 1 de enero de 2024 van a ampliar el número de naciones que componen el grupo.
Desde esa fecha, el bloque multilateral recibirá cinco nuevos Estados miembro: Irán, Egipto, Etiopía, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, países claves a la hora de de fijar los precios internacionales del petróleo y el gas.
“La ampliación del número de miembros era de esperar. Probablemente reforzará la importancia del grupo como foro de debate geopolítico, especialmente en Oriente Medio, de donde procede la mayoría de los nuevos miembros y donde China ha intentado aumentar su influencia”, le dice a BBC Mundo Michael Langham, analista de mercados emergentes de Abrdn.
“También es previsible que el grupo utilice su expansión como herramienta para influir en el debate político internacional y en el desarrollo de instituciones internacionales al margen del G7, el G20 y la ONU”, añade.
El cambio de Argentina
En la cumbre del pasado mes de agosto, Argentina fue invitada a unirse al grupo, pero el triunfo en las elecciones presidenciales de Javier Milei cambió las cosas. El nuevo presidente ha declarado que no se unirá.
Esta nueva administración «no considera oportuna la incorporación de la República Argentina al BRICS como miembro pleno a partir del 1 de enero de 2024″, afirmó Milei en una carta oficial dirigida al bloque.
“Esto es consistente con su deseo declarado de cortar los lazos políticos con China. Milei apoya y es amigable con figuras destacadas de la derecha estadounidense”, recuerdan los expertos del centro de análisis Americas Society.
Los BRICS toman decisiones una vez al año y los miembros del grupo se turnan para ostentar la presidencia durante un año.
En busca de un nuevo orden global
El principal objetivo de China para este foro, dice el profesor Padraig Carmody, experto en geografía del desarrollo en el Trinity College de Dublín, es el de «aumentar su poder e influencia, especialmente en África». «Quiere ser la voz líder del Sur Global».
Pero Rusia, la otra gran potencia mundial de los BRICS , tiene un propósito diferente.
«Rusia lo ve como parte de su lucha contra Occidente. Cree que su pertenencia le ayuda a superar las sanciones impuestas tras la invasión de Ucrania», dice Creon Butler, del grupo de expertos Chatham House, con sede en Londres.
Por otro lado, la membresía de Irán podría aumentar el carácter antioccidental de los BRICS, añade Butler.
No se ha anunciado ningún nombre para el grupo ampliado, pero se cree que podría ser » BRICS+».
¿Por qué son importantes los BRICS?
“Según las proyecciones del FMI, los países del BRIC representarán el 33,6% de la producción mundial en 2028, en comparación con el 27% del G7”, explica desde Singapur Claudio Piron, analista de Bank of America Merrill Lynch.
El grupo ampliado tiene una población combinada de alrededor de 3.500 millones de personas, o el 45% de la población mundial.
Su economía en conjunto vale más de 28,5 billones de dólares, alrededor del 28% de la economía mundial.
Los BRICS producen además alrededor del 44% del petróleo crudo del mundo.
“Creemos que los exportadores de materias primas estratégicas, como Brasil, tienen una ventaja. Y aunque China está ganando importancia en la inversión y el comercio, Occidente sigue siendo más importante para casi todos los mercados emergentes”, dice Piron.
En numerosas ocasiones Arabia Saudí y Rusia han hecho uso de su poder para recortar la producción de petróleo.
“Esto demuestra la capacidad que tienen las economías BRICS actuales y las nuevas incorporaciones de hacerse escuchar controlando los precios de la energía y recordándonos lo delgada que es la línea que separa a las materias primas de la política”, explica Dan Scott, economista jefe de Vontobel Multi Asset.
También diferencias
Pero no todo son coincidencias dentro del grupo.
Aunque existen claros objetivos comunes como aumentar su influencia geopolítica, remodelar y desafiar las instituciones y prácticas mundiales existentes y reducir su uso del dólar estadounidense, los objetivos geopolíticos de todos no son los mismos.
“De hecho, Brasil, India y Sudáfrica se han opuesto a que el grupo se perciba como un desafío directo a Occidente. Y en el caso de India, preocupa que el grupo sea un vehículo para que China amplíe su influencia. La ampliación del número de miembros añadirá más complejidades y probablemente limitará las posibilidades de que surjan grandes planes de reforma del grupo”, afirma Langham.
«En este sentido, esperamos que la atención se centre en gran medida en la expansión de los lazos comerciales y financieros entre los miembros, incluido un mayor uso de las monedas locales, y en la posibilidad de cuestionar las actuales prácticas internacionales que se consideran favorables a los mercados desarrollados”.
¿Una moneda que reemplace al dólar?
Las naciones suelen utilizar el dólar estadounidense para comerciar entre ellas.
Los principales políticos de Brasil y Rusia han sugerido crear una moneda alternativa para reducir su dominio. Sin embargo, esto no se discutió en la cumbre de este año celebrada en Johannesburgo.
Sería poco práctico para los países del BRIC del crear una moneda común porque sus economías son muy diferentes, dice el profesor Carmody.
Según los líderes del BRIC, el dólar no está cumpliendo su función como referente mundial y es en parte responsable por la inestabilidad económica global.
“La preocupación de que el grupo desafíe por ahora la hegemonía del dólar parece exagerada, teniendo en cuenta que los objetivos geopolíticos de los miembros compiten entre sí y que éstos no están dispuestos a ceder el control sobre los tipos de cambio y/o la política monetaria”, aclara Langham.
¿Cómo utilizará Rusia su presidencia de los BRICS en 2024?
Rusia será la sede de la cumbre del bloque en Kazán en octubre. Vladimir Putin ha dicho que utilizará la presidencia para:
- Aumentar el papel de los BRICS en el sistema financiero internacional.
- Desarrollar la cooperación entre bancos y ampliar el uso de las monedas BRICS.
- Promover la colaboración entre las autoridades tributarias y aduaneras.
«Con los BRICS, Rusia querrá mostrar a Occidente que todavía tiene amigos y aliados en el resto del mundo, a pesar de su invasión de Ucrania», dice Irene Mia del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, un centro de análisis con sede en Londres.
Fuente: https://www.bbc.com/mundo/articles/c4nyzy0dgd7o